Drama pasional en la Calle Angosta: mató a su pareja de un balazo en la cabeza y se quitó la vida
Cuando los efectivos de la Comisaría 9ª de Villa Mercedes llegaron al Fiat Palio, blanco, pudieron percatarse de otros detalles de los que ningún pariente quisiera ser testigo.
La mujer de 50 años estaba en el asiento del conductor y el hombre de 42 en el del acompañante. La mano derecha de Ricardo todavía retenía el revólver calibre 38.
Según los escuetos datos que la Policía brindó sobre la pareja, Graciela trabajaba como enfermera en el hospital de día "Doctor Braulio Moyano" de La Ribera y Ricardo era empleado en una fábrica. Ambos tenían hijos adultos de relaciones anteriores.
Eran novios de hace unos dos o tres meses, refirió César Prado, el jefe de la División Homicidios. Aunque primero transcendió que Garro residía junto a sus padres, donde lo hallaron muerto, en Calle Angosta al 166, después Marcelo Acevedo, el jefe de la seccional 9ª, confirmó que su nuevo domicilio era uno de calle Vicente Dupuy. Allí alquilaba junto a Graciela.
Las últimas personas que lo vieron con vida fueron las primeras en encontrarlos estáticos en los asientos del coche.
El domingo los dos habían ido hasta la casa de los padres de Ricardo. Fueron para ver el debut de la Selección Argentina en el Mundial Brasil 2014, indicó Acevedo.
En Calle Angosta, casi esquina Los Álamos, estuvieron hasta bien entrada la noche. El comisario no pudo precisar la hora en que se despidieron de sus familiares.
"Después los padres de Garro se fueron a dormir y no percibieron de que el Fiat Palio seguía en el mismo lugar", puntualizó. Pero, pese a la proximidad entre la calle y la vivienda y la quietud y el silencio de la noche, los ancianos no escucharon ningún disparo.
Recién se dieron cuenta de que el rodado jamás fue movido de donde lo habían visto por última vez al otro día. "A las 6:30 vieron el auto ahí, pero recién a las 8:30 notaron que sus ocupantes estaban sin vida", señaló el jefe de la seccional 9ª.
Al poco tiempo, la estrecha vereda de la empedrada calle se colmó de familiares, la mayoría son, además, vecinos de la esquina.
La autopsia comenzó pasada la una de la tarde y duró tres horas. De acuerdo a lo que informó Prado, el arma habría sido accionada entre la 2:30 y 3 de la mañana. La pareja tenía una herida de bala en la zona parietal, pero no precisó en qué parte de la sien. El cuerpo de Graciela mostró señales de que hubo una pelea antes de que la alcanzara la bala que la calló para siempre. "Tenía hematomas en distintas partes", dijo Acevedo.
Hasta el momento, los investigadores sólo saben que en su fugaz noviazgo la pareja "estaba bien", no existía ningún problema que anticipara lo que pasó. Sin embargo, entre los vecinos del barrio Estación se escabulló el rumor de que eso no era así y que la mujer tenía pensado acabar con la relación esa misma noche.
No hay comentarios:
Publicar un comentario