HACIA UN PROTOCOLO PARA VÍCTIMAS DE ABUSOS
de
larepublica.com.ar
de Corrientes
intenta eludir a la justicia
José Fusz es
un corredor de picadas que tras la difusión de su caso borró su perfil
de Facebook. La dirección dada a la policía no existe.
Intentando eludir a la Justicia, el acusado de
atropellar y abandonar a una chica de 14 años, brindó un domicilio
falso. Se trata de José Fusz, un corredor de picadas que tras la
difusión de su caso borró su perfil de la red social Facebook. La
dirección dada ante la policía no existe. La menor aún se repone de sus
heridas.
El joven señalado por numerosos testigos como responsable de haber atropellado y abandonado a una adolescente en la costanera correntina en abril pasado, mintió en su declaración ante la policía al dar datos falsos sobre su domicilio, de manera de evitar que le lleguen notificaciones o citaciones y así eludir su responsabilidad en el hecho.
Justo José Fusz, de 19 años, que manejaba un Ford Fiesta, patente DGB 354, es hijo del asesor legal de un colegio privado de esta ciudad, donde justamente terminó sus estudios secundarios. Cuando declaró en la comisaría primera, casi 24 horas después del accidente, dio una dirección que según el Correo Argentino, no existe.
De averiguaciones realizadas en la zona de ese domicilio inexistente, los vecinos coincidieron en asegurar que nunca vieron a nadie de esas características por la zona ni conocieron a nadie con ese nombre. Agrava la situación el hecho de que ese domicilio declarado es el que figura en el padrón electoral del departamento San Cosme, al igual que el de su padre.
Fusz atropelló a la menor el 14 de abril último. En ese instante se dio a la fuga y recién al otro día se presentó con un abogado en la comisaría primera aduciendo haber estado muy nervioso, por lo que cuando llegó a su casa –según declaró– le suministraron un calmante y se acostó a dormir. De esta manera evitó cualquier posibilidad de un test de alcoholemia.
Tras el hecho, que sucedió frente al anfiteatro José Hernández, Fusz siguió haciendo alarde de su participación en picadas de autos y de conducir bebiendo cerveza, algo que reflejaba con fotos en su muro de la red social Facebook, del que desapareció esta semana tras tomar estado público su caso.
Los testigos aseguran que el joven “tomó la curva a alta velocidad y en lugar de frenar cuando se encontró con la adolescente, aceleró su marcha provocando el impacto”.
Miró lo que había sucedido y se alejó del lugar a toda velocidad supuestamente hacia su casa, en un lugar hasta ahora desconocido por la Justicia, donde relató lo sucedido y se acostó a dormir con la anuencia familiar, mientras su víctima se encontraba en la sala de emergencias del Hospital Juan Pablo II siendo atendida de sus múltiples golpes, en la de cadera y rodilla y cortes en el cuero cabelludo.
El joven señalado por numerosos testigos como responsable de haber atropellado y abandonado a una adolescente en la costanera correntina en abril pasado, mintió en su declaración ante la policía al dar datos falsos sobre su domicilio, de manera de evitar que le lleguen notificaciones o citaciones y así eludir su responsabilidad en el hecho.
Justo José Fusz, de 19 años, que manejaba un Ford Fiesta, patente DGB 354, es hijo del asesor legal de un colegio privado de esta ciudad, donde justamente terminó sus estudios secundarios. Cuando declaró en la comisaría primera, casi 24 horas después del accidente, dio una dirección que según el Correo Argentino, no existe.
De averiguaciones realizadas en la zona de ese domicilio inexistente, los vecinos coincidieron en asegurar que nunca vieron a nadie de esas características por la zona ni conocieron a nadie con ese nombre. Agrava la situación el hecho de que ese domicilio declarado es el que figura en el padrón electoral del departamento San Cosme, al igual que el de su padre.
Fusz atropelló a la menor el 14 de abril último. En ese instante se dio a la fuga y recién al otro día se presentó con un abogado en la comisaría primera aduciendo haber estado muy nervioso, por lo que cuando llegó a su casa –según declaró– le suministraron un calmante y se acostó a dormir. De esta manera evitó cualquier posibilidad de un test de alcoholemia.
Tras el hecho, que sucedió frente al anfiteatro José Hernández, Fusz siguió haciendo alarde de su participación en picadas de autos y de conducir bebiendo cerveza, algo que reflejaba con fotos en su muro de la red social Facebook, del que desapareció esta semana tras tomar estado público su caso.
Los testigos aseguran que el joven “tomó la curva a alta velocidad y en lugar de frenar cuando se encontró con la adolescente, aceleró su marcha provocando el impacto”.
Miró lo que había sucedido y se alejó del lugar a toda velocidad supuestamente hacia su casa, en un lugar hasta ahora desconocido por la Justicia, donde relató lo sucedido y se acostó a dormir con la anuencia familiar, mientras su víctima se encontraba en la sala de emergencias del Hospital Juan Pablo II siendo atendida de sus múltiples golpes, en la de cadera y rodilla y cortes en el cuero cabelludo.
No hay comentarios:
Publicar un comentario