Merlo: llegan los abuelos despues de las vacaciones escolares de invierno

TODA UNA VIDA

 


de
La República
de San Luis

Provincia - | 04-08-2014 | 17:14 | 0

Merlo despidió las vacaciones con la llegada de los jubilados

Mientras los autos familiares pegaban la vuelta, diversos colectivos contratados estacionaban por la Avenida del Sol.

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  1/1 Recién llegadas. Antonia Córdoba y Carmen Cammarata destacaron la cordialidad de la gente.

Si bien el cierre de las vacaciones obligó a miles de turistas a regresar a su rutina, en Merlo comenzaron a llegar diversos colectivos de agencias de Buenos Aires, principalmente. Por lo que, a cambio de los grupos familiares, llegaron más de quince contingentes de jubilados.

Es la primera vez que vengo y la verdad que me encanta. Además es muy buena la atención, la seguridad y la limpieza”, afirmó Antonia Córdoba.

Lejos de vaciarse las calles de la villa serrana, la Avenida del Sol y el microcentro mantienen visitantes cargados de cámaras de fotos, gorros y bolsas con regalos.
“Estoy muy conforme con este lugar, porque tuvimos un viaje muy lindo y esta localidad es hermosa. Es la primera vez que vengo y la verdad que me encanta. Además es muy buena la atención, la seguridad y la limpieza”, afirmó Antonia Córdoba, mientras su compañera de viaje, Carmen Cammarata señaló la cordialidad de los vecinos: “Es muy recomendable. Ya vine una vez en auto, y también conozco Potrero de los Funes, Anchorena y parte del sur. Lo que tiene es la amabilidad de la gente de acá. Uno que viene de Buenos Aires nota mucho esa diferencia”, agregó.
Apuradas por llegar al almuerzo preparado por el hotel, Noemí Siryfzka y Rosa Vaquel destacaron la comuna por su tranquilidad y los atractivos naturales para recorrer sin prisa, pero sin pausa. “Te cuento, pero mientras, caminemos porque nos van a servir la comida”, aclaró Siryfzka y siguió: “No lo conocía, pero me habían dicho que era hermoso, y la verdad que es muy cierto. Nosotras somos de viajar cuando se puede. Por ejemplo, para Pascuas fuimos a Bariloche. Y gracias a Dios hay bastantes posibilidades de salir por los centros de jubilados”, explicó la turista.
Un poco más relajado, sin horario ni destino, Vicente Fucile y su mujer Stella Maris observaban con atención cada complejo de cabañas, locales y lotes. Es que el matrimonio de Buenos Aires ya compró algunos terrenos y departamentos, y no ve la hora de mudarse a la villa.
“Estamos viniendo cada dos meses, y nos gusta mucho esta zona por todos los atractivos turísticos que tiene la provincia. Además es una ciudad chica pero que tiene de todo: turismo, alegría, movimiento. Vengo hace tres años y es notable el crecimiento que se dio. Incluso es un buen lugar para invertir”, explicó Fucile, quien tiene pensado poner un centro de gastroenterología.