Sebastián
Crismanich eligió quien guardará su medalla de oro
No
se ha separado de su medalla de oro y la lleva a todos lados en la Villa
Olímpica. Pero con la mente en el regreso al país y en el reencuentro con su
familia, nos cuenta
-
Me
habían anticipado que me van a esperar con una autobomba, sé que va a ser una
vuelta impresionante. Días y días de salir con mis amigos y mi familia; quiero
festejar con todos. Por eso me voy a tomar mi tiempo para hacerlo, hubo mucha
gente que estuvo atrás de esto para que yo esté cumpliendo este sueño
En
cuanto al destino de su preciado galardón, confía
-
No
sé dónde irá a parar, qué hará con esta medalla. Me queda decirle: 'mamá,
cumplí mi objetivo' y ahora voy por otro, que es recibirme'. Antes de venir me
dijo: 'trae la medalla de oro que es tu sueño y después recibite y cumplí el
mío’.
Y
comparte sus sentimientos ante el éxito que alcanzó
- Ver
la bandera y escuchar el himno es lo que más emociona. Si ustedes pudieran
vivir tan sólo un segundo de lo que yo he vivido escuchando el himno y
mostrándole a todo el mundo que hoy la Argentina está ahí arriba... La verdad,
vivirían toda una vida para disfrutar un solo segundo de eso. Es lo único que
puedo decir", agrega y dice más "Tenía miedo de caerme, me temblaba todo
el cuerpo de la emoción que tenía. Cuando empecé con el taekwondo pensé en que
yo podía ser campeón mundial".
A
Sebastián el sueño se le cumplió, concluye la nota de La Gaceta
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